Mi respuesta es que hay muchos factores que determinarían la que tiene más sentido:
1) Consecuencias de los errores - Si los insectos daría lugar a la gente morir, entonces creo que una beta sería una mala idea. ¿Podría imaginarse ejecutar un software beta en un reactor nuclear o en un sistema de misiles? Por otro lado, si la consecuencia es bastante menor, como si hay un corte temporal en algún sitio de deportes de fantasía, puede que no sea tan malo publicarlo en versión beta.
2) Expectativas de los usuarios. Piense en los usuarios de la aplicación y en cómo se sentirían al usar algo que es una "beta". Si esto les da miedo de usar el software realmente y temen que explote con regularidad y que estén plagados de errores, eso también puede jugar un papel.
3) Tamaño de la aplicación. Si vas a construir algo muy grande como, por ejemplo, un ERP para manejar los requisitos legales de 101 países y contener cientos de módulos adicionales, entonces una versión beta puede ser más sólida que intentar hacer todo y nunca llegar a donde tienes clientes.
4) Despliegue. Si está configurando algo donde el código se ejecuta en sus propias máquinas y puede actualizarse y parchearse fácilmente, entonces una versión beta puede ser mejor que tratar de hacer todo al principio.
5) Metodología de desarrollo. Si tomas un enfoque de cascada, entonces no es probable que una beta sea una mejor opción, mientras que en un escenario ágil, una beta tiene mucho más sentido. La razón de esto último es que en el caso ágil habrá múltiples lanzamientos que mejorarán el producto a lo largo del tiempo.
Solo tengo algunas cosas en cuenta ya que hay algunos casos en los que me imagino fácilmente usando betas y en otros casos evitaría las betas tanto como fuera posible.
¿Estás hablando de código abierto o desarrollo comercial? – Zifre
comercial dev. – madcolor